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Mark Zuckerberg envía sus yates a miles de kilómetros para subir en helicóptero y bajar esquiando

Aventuras exclusivas: Mark Zuckerberg fusiona lujo y adrenalina al esquiar en montañas noruegas, usando un superyate y helicóptero. ¡Una experiencia única e inolvidable!

Autor: Patricia Alegsa

23-04-2025 22:14

Mark Zuckerberg envía sus yates a miles de kilómetros para subir en helicóptero y bajar esquiando

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Vacaciones de lujo en alta mar

Mientras muchos de nosotros disfrutamos de la Semana Santa en playas mediterráneas o explorando ciudades tranquilas, Mark Zuckerberg, el cerebro detrás de Meta y uno de los hombres más ricos del mundo, eleva el concepto de vacaciones a un nivel completamente nuevo.

Este año, decidió llevar su amor por el esquí a Noruega, pero no de la manera convencional. Con la ayuda de su flota de superyates, valorada en 330 millones de dólares, Zuckerberg se embarcó en una travesía épica de 8.500 kilómetros a lo largo del círculo polar ártico para disfrutar de una experiencia de esquí sin igual.

El arte del heliesquí

El heliesquí es una modalidad que combina adrenalina y exclusividad, permitiendo a los esquiadores ascender a la cima de montañas remotas en helicóptero para luego descender por pendientes de nieve virgen.

Sin embargo, esta actividad requiere permisos especiales debido a las regulaciones medioambientales estrictas en áreas como Noruega. No obstante, Zuckerberg encontró una manera ingeniosa de sortear estas restricciones.

Al utilizar el helipuerto de su yate como punto de aterrizaje, logró esquiar sin necesidad de permisos oficiales, aprovechando una laguna legal que le permitió disfrutar de las montañas noruegas y suecas sin contratiempos.

Yates de lujo y aventuras árticas

El Launchpad, un majestuoso superyate de 118 metros de eslora, se convirtió en el hogar flotante de Zuckerberg durante este viaje.

Equipado con todas las comodidades imaginables, actuó como base de operaciones mientras el Wingman, un barco de apoyo, sirvió como helipuerto para el helicóptero que facilitó las excursiones de esquí.

Anclados en los impresionantes fiordos noruegos, estos yates no solo proporcionaron un lujoso refugio, sino que también permitieron al magnate explorar uno de los paisajes más remotos y cautivadores del planeta.

El poder de la libertad financiera

El despliegue de la flota de Zuckerberg no es un hecho aislado. En ocasiones anteriores, ha enviado sus yates a destinos lejanos, preparados para recibirle incluso si él no llega a aparecer.

En 2024, por ejemplo, el Launchpad navegó desde San Francisco hasta Tahití, permaneciendo anclado durante meses a la espera de su dueño, aunque finalmente Zuckerberg no hizo acto de presencia.

Este tipo de maniobras, aunque extraordinarias, reflejan el nivel de libertad y poder que otorga una fortuna como la suya, permitiéndole explorar el mundo de maneras que para la mayoría son inalcanzables.

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